LO PLACENTERO Y LO NECESARIO

 

  Al ver a la mariposa, tendemos a creer que a ella lo necesario le resulta placentero. En cuanto al Hombre, ¿Cuántas veces le ocurre eso?

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En varias situaciones de nuestra vida se nos presenta una tensión, más o menos fuerte, entre aquello que nos resulta placentero,  y aquello que nos resulta necesario para los diversos aspectos de nuestra vida. 

  ¿A qué le dedicamos primero la atención, a lo placentero o a lo necesario? 

  Los resultados de prestar primero la atención a una una opción o a otra, o de prestársela sólo a una, pueden ser varios, y a nosotros nos corresponde ser conscientes de cuales son esos resultados para nuestra propia vida. 

   A la hora de optar por una de las dos opciones, pocas veces tenemos realmente en cuenta cual será la que nos traerá los resultados que buscamos, pues la mayoría de las veces nos guíamos por el peso que el placer y el dolor tienen en nosotros en el momento de escoger entre ambas opciones. Para poder escoger la opción más liberadora y más armónica, tenemos que mirar más allá del placer y del dolor. 

  En nuestra concepción de lo moral,  y en nuestras relaciones con los demás, la tensión se nos presenta entre lo placentero y lo que consideramos como nuestro deber.