HACER Y COMPRENDER

 

  Aunque el Hombre es Naturaleza, no acude a ella para comprender ésto, sino para hacer cosas. En la foto le vemos haciendo ejercicio para sentirse fuerte, ágil y saludable, y que eso le permita hacer más cosas. 

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 Hacer para conseguir lo necesario y lo deseado, para conservar lo conseguido. Para ser admirados, premiados, amados, respetados, temidos. Para demostrar a los demás y a nosotros mismos lo que somos. Para encontrar los medios y las herramientas que nos permitan aumentar nuestra eficacia.

  La moralidad, las leyes, y los conceptos filosóficos y religiosos sobre la libertad, se centran en lo que podemos hacer, en lo que no podemos hacer, y en lo que debemos hacer. 

  Mientras que los grupos sociales y los individuos estén centrados en tanto hacer, no les quedará tiempo, ni energía, para dedicarse a comprender la realidad de las cosas, ni a como vivir de acuerdo con esa realidad. Y así, a cada persona tampoco le quedará tiempo, ni serenidad, ni energía, para dedicarse a conocer lo que es, ni a como vivir de acuerdo con ello. 

  Que el Hombre le de más valor a hacer que a comprender, es la mejor muestra del camino que nos falta por recorrer.