FIELES A NOSOTROS MISMOS

 

   Nuestra verdadera naturaleza es la misma que la del Universo, pero aunque nuestra mente sepa que estamos hechos de polvo de estrellas, de ésto no tenemos conciencia. De ésta manera, nos encontramos con dos aspectos de nosotros mismos:

  *Unas veces nos identificamos con nuestro ego.

  *Otras veces con nuestro nivel de conciencia. 

  Éstos dos aspectos aparecen mezclados y se alternan, y se ven sometidos, por un lado a la presión de lo que creemos que es la mejor estrategia ante nuestras situaciones, y por  otro lado, a las presiones ajenas y a las influencias de todo tipo de creencias. En éstas situaciones, nos resulta difícil mantenernos fieles, siendo a la vez flexibles, a lo que consideramos que somos, y así, con frecuencia cedemos ante las presiones y las influencias, a cambio de conseguir lo deseado, de evitar conflictos, de ser admirados, premiados y amados. 

 Somo humanos, muy humanos, muy necesitados de seguir caminando. Y necesitados de comprender que, hagamos lo que hagamos, pensemos lo que pensemos, sintamos lo que sintamos, nuestra verdadera naturaleza se mantiene sin alteraciones, siempre a la dispoción de la conciencia que tomemos de ella.