Como la visión cíclica del Tao implica que un día el ego morirá, y como el ego no acepta su propia muerte, su visión es lineal, es decir, a pesar de los diferentes ciclos y etapas por las que pasan las cosas, y aunque algunas cosas puedan perecer, siempre hay algo que nace y algo que continua, y el ego cree que él continua con ello. Y como el cuerpo muere, el ego desarrolla creencias sobre su propia supervivencia y sobre su vida tras la muerte de su cuerpo.
Así, sólo la conciencia acepta la muerte, pues la conciencia sabe que la naturaleza del Hombre es Tao, y por lo tanto es eterna. Y así, cuando nacemos, todo lo que somos y lo que llevamos dentro, también es Tao, y tenemos acceso a la universal conciencia, la cual, aunque tengamos muchas imágenes de ella, también es inmutable y eterna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario