Control y equilibrio son conceptos que se suelen confundir:
¿Sabemos ver las diferencias entre ellos?
Cuando las cosas son como las deseamos o cuando nos sentimos satisfechos, creemos que estamos en el buen camino y, por lo tanto, no nos ocupamos de los descontroles o de los desequilibrios que pueda haber en nuestra vida o en nosotros mismos.
Cuando creemos que no tenemos el control de nuestra vida solemos buscarlo, pero eso nos cuesta esfuerzos y sacrificios. Y lo mismo ocurre cuando creemos que no estamos equilibrados.
Sin embargo, existen situaciones que nos trae la vida o que nosotros mismos podemos crear, en las cuales no es necesario ejercer ningún control y enn las cuales nos equilibramos de forma natural, es decir, sin forzar nada, sin esfuerzos, sin sacrificios.
¿Sabemos ver o sabemos crear esas situaciones?
Lo demás son artificios, complejidades, laberintos, confusiones...
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