Somos seres sociales, es decir, necesitamos de las relaciones sociales para poder sobrevivir. Además, la mayoría de las veces basamos los aspectos más importantes de nuestra vida en las relaciones con los demás. Debido a esto, nuestro ego tiene unas necesidades y unos deseos en relación con los demás. Y esas necesidades y deseos, también los tienen los egos de los demás, aunque el comportamiento de cada persona presente diferencias respecto a los demás.
Nuestro ego necesita de los de los demás que no nos hagan daño y que nos ayuden.
Nuestro ego desea de los demás que crean lo que creemos y que se comporten como nos gusta.
Estas necesidades y estos deseos dan lugar a esa dinámica que todos conocemos:
Lo primero es que nos amen.
Si no nos aman que nos admiren.
Si no nos admiran que nos respeten.
Si no nos respetan que nos teman.
Que nos amen.- A todos nos gustaría que nos amaran por lo que somos, pues así no tendríamos que hacer ningún esfuerzo sacrificio para que nos amaran, y de esta manera conseguríamos ser amados y además ser libres a la vez. Pero los demás nos aman a cambio de lo que les damos, es decir, de nuestra bondad hacia ellos. Sin embargo, cuando somos bondadosos unos nos aman y otros creen que pueden abusar de nosotros, pero en todo caso siempre perdemos una parte de nuestra libertad.
Que nos admiren.-Ser admirados es una forma de ser amados, y para ello recurrimos a mostrar nuestras virtudes, nuestras capacidades, a mostrarnos vanidosos, o a mentir y a ocultar nuestros defectos e incapacidades. La admiración tiene una cara oscura, y es que a veces aquello por lo que se nos admira es causa de envidia hacia nosotros, pero en envidioso nunca reconoce que lo es.
Que nos respeten.- El respeto es una mezcla variable de admiración por nuestras virtudes y capacidades, y de bondad y de compasión ante nuestras necesidades y ante nuestro dolor.
Que nos teman.- Se nos teme debido a nuestras capacidades para hace daño y para causar dolor, y por ello el temor va acompañado por el odio.
Esta es mi visión, la cual no tiene por qué ser cierta, pero tampoco será cierta toda visión que ponga el énfasis en vernos a nosotros mismos como seres diferentes o especiales, o bien que confíe o desconfíe mucho de la naturaleza humana.
Este es nuestro ego, o al menos una aproximación al mismo, pero no solamente somos ego.
¿Lo que nuestro ego oculta, dónde y cuando se noso muestra?
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