Las esperanzas son sueños en los que caemos cuando no aceptamos la realidad, o cuando aunque tengamos lo necesario no nos resulta suficiente.
Cuando no se consiguen nos frustramos. Cuando se consigue una esperanza pronto deja de resultarnos suficientes y así soñamos con otra y siempre hay una que no llega.
Hay quienes dicen que la esperanza es lo último que se pierde, pero éstos no nos dicen lo que nos ata y lo que no comprendemos mientras esperamos.
Los sueños, sueños son, y sólo la realidad es el despertador.
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