Las diferentes situaciones que se nos presentan en la vida nos producen diferentes pensamientos y sentimientos, y también nos los producen la orientación que le damos a nuestra vida, y los objetivos que queremos alcanzar.
Tanto a nuestros pensamientos como a nuestros sentimientos los juzgamos de diferentes maneras, pues unas veces nos resultan placenteros y otras dolorosos. Unas veces nos parecen defectos y debilidades, y otras veces nos parecen virtudes y capacidades. Unas veces nos parecen buenos y otras malos, unas veces nos parecen ciertos y otras veces nos parecen falsos.
Sin embargo, a la hora de aprender todos son igualmente necesarios, todos tienen sus contenidos sabios.
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