ESCRIBIR

    La soledad es una buena situación para escribir. Una forma fácil de empezar a escribir es descibrir lo que se observa, por ejemplo en esta foto. 

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   Escribir sirve para muchas cosas: 

  *Nos permite ahondar mejor en nuestro interior. 

  *Nos permite ordenar y armonizar mejor nuestras ideas. 

  *Nos permite sacar recuerdos olvidados. 

  *Nos permite descubrir conocimientos que creíamos que no teníamos. 

  *Si nos comunicamos con los demás frente a frente, nuestra comunicación gana en matices, en emociones, en intuiciones, en afectos. Si nos comunicamos por escrito, nuestra comunicación gana en claridad de exposición, y cuando dominamos la escritura podemos asegurarnos de que realmente se nos ha entendido, cosa que pocas veces se consigue en una conversación, pues en las conversaciones aparecen muchas veces los egos, y los egos escuchan poco y comprenden menos. En cambio, cuando nos leen, eso se hace sin la presencia del ego del que escribe, se hace muchas veces en soledad serena y tambien en silencio, y esto facilita mucho el que nos entiendan y nos comprendan. 

  Cuando se adquiere la costumbre de escribir, aunque no sea para comunicarse con los demás sino para ahondar más en las cosas, se produce la siguiente dinámica: 

  1º) Desde diversas fuentes noso llega un pensamiento, una idea, que toma fuerza en nosotros, con lo cual empezamos a ver todas sus posibilidades y todo su alcance. A veces, el alcance es corto y acabamos por olvidarlo. Pero otras veces no. 

  2º) Cuando el alcance es largo nuestra mente (tanto la parte consciente como la inconsciente) no para de ahondar y van apareciendo nuevos elementos, y poco a poco, se va configurando un orden, una armonía en nuestros pensamientos e ideas.

  3º) Ese orden, esa armonía empieza a producirnos una tensión interior y entonces surge en nosotros el impulso de que tenemos que escribir, pues así podremos darle cuerpo físico a nuestra armonía interior y podremos liberarnos de esa tensión, cosa que realmente ocurre cuando terminamos de escribir y hemos dado por bueno lo escrito. 

 4º) Con la paz y la serenidad interior llega el descanso, y una vez hemos descansado estamos en condiciones de iniciar de nuevo el ciclo, pero ahora estaremos en mejores condiciones, pues tenemos como base todo lo que hemos aprendido y descubierto en el ciclo anterior. Y así sucesivamente, ciclo a ciclo vamos aumentando nuestra sabiduría.