-Cada persona y cada grupo social tiene unos deseos y unas creencias diferentes, y muchas veces ambos opuestos a los de los demás. Pero sociedad sólo hay una, coon lo cual no se puede satisfacer a todos. ¿Qué puedes decirnos de esto, Maestro?
-Dijo un discípulo.
-Que es un problema que yo no se como resolver. Por un lado, una posible solución es que la gran mayoría de la sociedad tenga los mismos deseos y las mismas creencias. ¿Pero cómo conseguir esto y a la vez respetar todas las libertades y derechos de los individuos?. Otra posible solución es que la gran mayoría tolere los deseos y las creencias de los dem´mas, pero para esto todo el mundo tiene que renunciar a algún deseo o a alguna creencia. ¿Cómo pueden las personas renunciar a una parte de sus deseos y creencias cuando la creencia dominante es que lo más importante es conseguir lo deseado? -Dijo el Maestro.
-Pero las grandes personas sabias nos han dejado soluciones. -Objetó el mismo discípulo.
-Las grandes personas sabias nos han dejado mapas de sabiduría, pero el camino tenemos que hacerlo cada uno de nosotros y por nosotros mismos. Y aunque las tradiciones espirituales han desarrollado diversas técnicas para el crecimiento espiritual, esas técnicas tiene que aprenderlas y practicarlas cada uno por sí mismo. Y esto es visto por muchos como un problema, y ese problema yo tampoco sé como resolverlo. -Dijo el Maestro.
-Maestro, perdona, pero no sabes resolver los grandes problemas. -Dijo el mismo discípulo.
-Bueno, hay uno que creo que he resuelto: ya no necesita a nadie que me resuelva mis problemas espirituales. He comprendido que tengo el potencial para resolverlos, y en ello estoy. No sé si resolveré los problemas de los que acabamos de hablar, pero sé que nadie me los resolverá. Si ante las dificultades o los problemas ponemos nuestras esperanzas en los dioses, en los héroes o en las personas sabias, siempre tendremos el problema de depender de ellos, y mientras dependamos de ellos ni seremos sabios ni libres. -Dijo el Maestro y guardó silencio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario