El Hombre tiene dos dificultades con la realidad:
*Conocerla.
*Aceptarla.
Ante esto surgen esas ilusiones a las que llamamos creencias. Aunque nos agitan, perturban y confunden, cuando las damos por ciertas, en ellas ponemos las esperanzas, con ellas creamos todas las justificaciones de nuestros actos, de nuestros éxitos y fracasos, de todo por lo que luchamos, de todos los conflictos que creamos, sobre lo que nunca alcanzamos, y creyendo, vivimos como podemos.
A NO creer, ¿Cómo aprendemos?
Tenemos el Cielo, tenemos el suelo,
tenemos lo que nos luce dentro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario