AYUDADOS

   * Necesita ser ayudado el enfermo, el limitado, el que no tiene para comer, el corre un peligro inminente. En estos casos, las ayudas vendrán o no vendrán, serán suficientes o insuficientes, de los seres queridos, de los responsables legales y profesionales, o de aquellos que se encuentren cerca.

 * Ante otras situaciones concretas y puntuales, todos agradecemos que nos ayuden, pues sin esa ayuda difícilmente conseguiríamos lo que necesitamos o lo que deseamos. En estos casos, aunque se crean ciertas relaciones de ligera dependencia, también se crean lazos afectivos sinceros. 

* En las demás situaciones personales de problemas crónicos, en situaciones permanentes y cotidianas, en situaciones de desear lo no necesario, en situaciones de conseguir lo soñado, en todas estas situaciones, recibir ayuda hace que el individuo ayudado aumente la esclavitud respecto a sus deseos o necesidades y surja la dependencia respecto de su benefactor. Además, el ayudado tiene a volverse incapaz y a no aprender a ser autosuficiente y libre. 

* Cuando las situaciones del punto anterior se dan en el ámbito social, los grupos sociales que piden ayuda se vuelven dependientes y sometidos a sus benefactores, y así es como se han establecido las actuales relaciones sociales basadas en el poder de los poderosos y en la sumisión del resto de la sociedad, sociedad sometida que sigue confiando en los poderosos, en los líderes políticos, en salvadores diversos, o en organizaciones caritativas.  Y al igual que en el caso de los individuos ayudados, tienden a volverse incapaces y a no aprender a autogobernarse y a ser libres. 

* Por otra parte, como el conjunto de la sociedad rechaza la armonía con el Universo y con la Naturaleza y por contra busca imponer su poder y su control sobre la Naturaleza para así conseguir lo deseado, y como en vez de buscar la autosuficiencia y la armonía busca la ayudada caritativa, tanto la ayuda que se pide, como la ayuda que se da, siempre están en desarmonía con el fluir natural de las cosas. y de esta manera, tanto para los ayudados como para los benefactores, la ayuda es un fuerte impedimento para desarrollar la libertad interior y para orientarse hacia el horizonte de la armonía.