Cubrir nuestras necesidades de supervivencia depende totalmente de la Naturaleza, pues de Ella proceden todas las materias primas con las que construimos todos los bienes materiales, toda la energía que usamos para producirlos y transportarlos, y sobre todo, de Ella sigue procediendo todo nuestro alimento.
Por otra parte, conseguir muchos de nuestros deseos de cosas no materiales y muchos de nuestros placeres también depende de la Naturaleza. Sin embargo, a la hora de conseguir esas necesidades y esos deseos, se nos abren dos caminos:
* Vivir en armonía con la Naturaleza.
* Dominar o controlar a la Naturaleza.
Vivir en armonía con la Naturaleza nos permitió en el pasado conseguir todo lo que necesitábamos para nuestra supervivencia, (al igual que se lo perite casi siempre a todos los demás seres vivos), y tiene el potencial de conseguirlo en el futuro, y también nos permite poseer algunos bienes materiales y muchos placeres, pero no nos permite conseguir todos los bienes materiales ni todos los placeres que deseamos.
Nuestra inteligencia nos permite acceder al conocimiento científico y al desarrollo tecnológico, y estos dos aspectos han posible dominar y controlar ciertos aspectos de la Naturaleza, aspectos que nos permiten conseguir nuestras necesidades de supervivencia y muchos bienes materiales y placeres.
En un mundo dominado por los deseos de cosas materiales y de placeres, la inteligencia, la ciencia y la tecnología son lo más adorado y admirado, y lo más utilizado a la hora de conseguir la mayor parte de las cosas que deseamos.
Hemos llegado a un punto en el cual, el hecho de armonizar con la Naturaleza no nos permitiría conseguir nuestras necesidades de supervivencia, con lo cual, nuestra armonía con Ella hoy sólo puede darse a nivel interior, a nivel espiritual. Este hecho, junto a la adoración por nuestra inteligencia y por sus frutos científicos y tecnológicos, también nos aleja de la Naturaleza, es decir, nos divorcia de nosotros mismos.
Es natural y además necesitamos cubrir nuestras necesidades materiales, y necesitamos estar lo más sanos posible, de ello depende la supervivencia de nuestro cuerpo, y de nuestro cuerpo depende nuestro camino espiritual y de liberación y armonía, pero si nuestra relación con la Naturaleza se limitara a eso, no tendríamos ni problemas medioambientales, ni tantos conflictos, ni tantas frustraciones, ni tantas insatisfacciones, ni tanto sufrimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario