Lo ideal, trazado por los deseos y la inteligencia humana, al modo en el que un ingeniero o un arquitecto diseñan sus contrucciones, y al modo en el que las creencias y las ideologías pretende que se comporten los seres humanos.
Lo armónico, consistente en adaptarse a las situaciones y a las realidades creadas por el flujo natural de las cosas.
Un ideal es siempre un deseo de que las cosas sean como nos gustaría que fueran. Por otra parte, un ideal es siempre algo que no es armónico cono la realidad del Universo, de la Naturaleza, y por lo tanto tampoco es armónico con la realidad del Hombre, pues el Hombre es Universo y Naturaleza.
Luchar por un ideal, en caso de éxito lleva solamente a cambiar un artificio por otro, aunque creamos que el nuevo artificio sea mejor que el anterior, pero al ser un artificio producirá sufrimiento, traerá problemas. A lo largo de la Historia de la Humanidad, la substitución de los viejos artificios por los nuevos ha dado como resultados que en nuestra sociedad actual exista una esperanza de vida más alta que nunca, una mejor salud que nunca, un mayor bienestar material que nunca, con una mayor calidad de vida que nunca.
Pero también ha dado como resultado unos problemas medioambientales mayores que nunca. Por otro lado, el Hombre actual sigue sufriendo, sigue sintiendoo miedos, sigue frustrado, insatisfecho, pues sigue sin alcanzar sus ideales, sus esperanzas, y a veces sigue teniéndolas, y otras veces las pierde. Tenerlas le produce frustración e insatisfacción, y perderlas le hace sentirse desgraciado, sin apenas medios para sentirse satisfecho.
Frente al mundo de los ideales y de los artificios tenemos el mundo de la armonía con el Universo, con la Naturaleza, con la esencia y con la plenitud de la conciencia humana.
¿Qué podemos hacer para abandonar el mundo de los ideales y centrarnos en la búsqueda de la armonía?
*En primer lugar, cada individuo es el que tiene que decidir qué hace con su vida. Si el individuo no se decanta libremente por el camino de la armonía, no existe la manera de lo que haga.
*Por otra parte nos encontramos con que en realidad desconocemos las razones por las cuales los actuales niveles de conciencia de la Humanidad son los que son y no son otros más elevados.
*En tercer lugar, nos encontramos con que no sabemos como elevar ni nuestro propio nivel de conciencia, ni mucho menos el nivel de conciencia de los demás.
En esta situación no tiene objeto luchar para que la Humanidad se decante hacia el camino de la armonía. Y mucho menos tiene objeto luchar por imponerle a la sociedad, o a quienes nos rodean, el que adopten como normas de conducta solamente actitudes armónicas.
Esto nos lleva al camino individual de cada uno, a que los frutos de ese camino le resulten suficientes a quien lo siga, a que ese camino se base en la realidad armónica y no en las ilusiones, en los ideales.
Difícilmente podremos seguir ese camino, al menos durante mucho tiempo o en muchas situaciones de nuestra vida, por lo tanto, tendremos que aprender a aceptar el hecho de que existen muchos obstáculos y que tenemos muchas incapacidades, y aceptar también la forma enla que podamos ir superando esos obstáculos, y el tiempo que tardaremos en superarlos, y el hecho de que posiblemente muramos antes de haber superado la mayoría de los obstáculos y de nuestras propias limitaciones, pero busquemos la alegría celebrando la vida y cada paso de nuestro camino, vivamos con sencillez, con serenidad, y dejemos que el tiempo actúe.
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