Las diferencias que tenemos con los demás,
y las realidades de la libertad,
nos llevan a la soledad.
Para la supervivencia,
la compañía es necesaria,
más cuando estamos
temerosos o esperanzados,
sólo la buscamos,
para dominar lo natural,
o para conseguir lo soñado.
Soledad abierta:
Colores sin banderas,
victorias sin cadenas.
Territorios sin fronteras,
donde se ensanchan
las sendas internas,
y las albas nos despiertan.
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