SORDERAS

  *La producida por los ruidos y las agitaciones. 

  *La sordera a la que recurrimos para no tener que atender a tantas exigencias, a tantos lamentos, a tantas quejas, a tantas morales reclamaciones, y a tantos victimismos. 

 *La orginada por nuestro ego que sólo presta atención a lo que le permite conseguir lo deseado. 

 *La sordera selectiva producida por nuestras creencias, que sólo escucha aquello que está de acuerdo con lo que creemos. 

 *La sordera producida por escucharnos sólo a nosotros mismos. 

 *La sordera a la que recurrimos para no tener que escuchar tantas opiniones que no compartimos. 

 Sólo el silencio sereno y alado nos permite recuperar el oído y oír claramente el sonido del ritmo natural de las cosas. Sólo en ese silencio podremos encontrar las respuestas posibles a las preguntas, a las incertidumbres, a las esperanzas y a las ilusiones, todas las cuales son siempre agitadas, confusas y ruidosas. 

  Lo que hemos sirve para aplicarlo a las sorderas, también sirve para las cegueras.