Las creencias, la fuerza, el soborno, y la ciencia y la tecnología, siempre han sido las formas predilectas del Hombre para controlar, pues son también las herramientas que más deseos facilitan.
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Intentar controlar es lo contrario de aceptar, y es la vía principal seguida por el Hombre. Sin embargo, Lao Tse nos dice:
"Intentar controlar el futuro es
como usurpar el lugar del maestro carpintero.
Al usar sus herramientas,
lo más probable es que te cortes la mano."
(Tao Te King. Cap. 74)
A pesar de los muchos riesgos y de los muchos precios, quien no acepta el flujo natural, tiene un ego y unas creencias que entienden que existen dos vías: O la de controlar, o la de recibir ayudas. Pero ambas nos alejan de la realidad, dan lugar a diversas ilusiones, y reducen nuestra libertad y nuestras posibilidades de aumentar nuestra sabiduría.
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