LA LIBERTAD Y LAS RELACIONES SOCIALES

    En el ámbito de las relaciones sociales y personales, la libetad se puede usar de dos grandes maneras:

   1ª) Para liberarnos del dolor que nos produce la opresión ejercida por quienes tienen poder, pero también para liberarnos del dolor que nos producen las exigencias e imposiciones de quienes nos rodean. Para aumentar nuestra autosuficiencia material y emocional. Para disponer de más posibilidades de conocimiento y de comprensión, es decir, para ser más sabios y utilizar nuestra sabidiuría para alcanzar cada vez una mayor armonía. 

 2ª) Para conseguir nuestros deseos de poseer más bienes materiales, más placeres, para ser más admirados, más premiados, más amados, para conseguir aumentar nuestro poder o nuestro control sobre los demás. 

  *Cuando los demás usan la libertad solamente para conseguir liberarse de las diferentes formas de opresió, para ser más autosuficientes y para alcanzar la armonía, cuanta mayor sea su libertad, mayor será la nuestra. Por un lado, porque cuanto más autosuficientes sean y menos  dolor sientan, menos ayuda y atención nos pedirán y nos exigirán. Por otro lado, porque cuanto más se liberen de sus deseos de conseguir bienes materiales, placeres, premios y de sentirse amados, menos intentarán ejercer el poder y el control sobre nosotros. Por otra parte, porque cuanto mayor sea el número de personas que tengan este concepto de la libertad, más dificultades tendrán los poderosos y los ambiciosos para imponer su poder al conjunto de la sociedad. 

  *Cuando los demás usan su libertad con el objetivo principal e incluso único de conseguir más bienes materiales, más dinero, más placeres, más premios, más poder, cuanta mayor es su libertad, menor será la nuestra. Esta es la gran contradicción de nuestra sociedad sobre la libertad. Por un lado, porque quienes tienen está visión de la libertad, cuanta mayor es la libertad de la que disponen, más exigentes se vuelven, mayores son sus intentos de imponernos su poder y su control. Por otro lado, porque su ambición por conseguir lo que desean les lleva a luchar por ello y así surgen los conflictos, y de toda lucha y de todo conflicto siempre surge un ganador y un perdedor, y el ganador impone sus condiciones al perdedor, le impone su poder, su control. Y esta dinámica se da en cualquier tipo de régimen político o bajo cualquier tipo de gobierno, bajo cualquier tipo de leyes, de normas morales o de costumbres, culturas y tradiciones.

   Estos aspectos de la libertad aparecen como si se tratara de una especie de ley, con la cual podemos estar de acuerdo o estar en contra, pero que siempre tiene unas consecuencias inevitaales. En un caso esas consecuencias serán las de aumentar nuestra sabiduría, nuestra liberación y nuestra armonía, y en otros casos serán las de aumentar nuestras cadenas y nuestro dolor. Puede que no tengamos libertad para poder  hacer muchas cosas que nos gustaría hacer, pero lo que sí que tenemos es la libertad para que nuestra vida se oriente hacia una visión o hacia otra respecto a la libertad. Y recordemos, que no podemos hacer que nadie cambie su visión sobre la libertad, que sólo nosotros podemos cambiar la nuestra, y que para que algo cambie, el cambio tiene que empezar por nosotros.