La inmensa mayoría de los seres humanos viven dominados por la esperanza de que usando los medios y las estrategias adecuados, se puede conseguir lo necesario y lo deseado.
Ésta esperanza, al no aceptar lo natural, crea diversos artificios, y diversos conflictos, y ambos producen dolor, daños y desequilibrios, tanto a los seres humanos, como a los demás seres vivos, como a la Naturaleza.
Frente al dolor, los daños y los desequilibrios, la inmensa mayoría de los seres humanos sólo sabe recurrir a las esperanzas, y así la trampa se cierra.
¿Cómo evitarla?
¿Cómo escapar de ella?
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