*Cuando rechazamos algo, unas veces preferimos su contrario, y otras veces cosas diferentes.
*Cuando preferimos algo, en mayor o menor medida, rechazamos su contrario o cosas diferentes.
*Cuando aumenta la intensidad de lo rechazado, también aumenta la intensidad de lo preferido, y cuando disminuye una intensidad, también disminuye la otra. De ésta manera surgen las actitudes extremas y también las moderadas.
*Cuando exploramos serenamente, tanto en lo rechazado como en los preferido, vamos descubriendo que hay pocas razones para rechazar y para preferir, vamos descubriendo que son muchas más las ilusiones que las realidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario