rosal silvestre)
El número tres, representado tanto en forma de numero, como en diferentes formar y apariencias, es uno de los símbolos más utilizados, especialmente en la magia, en las religiones, en las tradiciones espirituales, y en todas las ramas del conocimiento y del pensamiento.
Pero aquí vemos a tres escaramujos, que no simbolizan nada, sino que se muestran a sí mismos desnudos y luminosos, es decir, como una visió directa de la realidad, una realidad que sólo requiere ser aceptada como lo que es, pues con lo que es la realidad ya tenemos suficiente para desarrollar lo que realmente somos, y que por lo tanto la realidad no necesita símbolos para ser representada, pues toda representación simbólica es una distorsión, un disfraz, una emoción que sustenta a una creencia, y por lo tanto, al creyente no sólo le impide conocer la realidad, sino que al predicador de la creencia le permite manipularla a su conveniencia dando un significado u otro a los símbolos, y haciendo que el creyente ponga en ellos las energías emocionales que al manipulador le parecen más convenientes.
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