Cuando no aceptamos nuestra naturaleza de seres sociales, y cuando no llegamos a acuerdos libres y gustosos, la sociedad recurre a crear normas morales y leyes.
Sin embargo, siempre hay personas que se sienten limitadas, reprimidas o perjudicadas por las normas y por las leyes vigentes, y entonces surgen los conflictos, y con los conflictos vienen los daños y el dolor, los vencedores y los vencidos, y los poderososos y los sometidos.
Todavía es largo el camino que nos queda por andar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario