viernes, 18 de agosto de 2017

LO SAGRADO



   Sólo unos pocos individuos optan por basar su vida en permitir que las cosas sigan su curso natural. Un grupo más amplio, pero minoritario, optar por basar su vida en el desarrollo de su mundo interior, de su espiritualidad. La gran mayoría opta por basar su vida en la consecución de sus deseos, y entre esta mayoría una parte centra su vida en que la sociedad sea como ellos quieren que sea. 

   Entre quienes basan su vida en conseguir sus deseos se produce el siguiente fenómeno de tipo psicológico, moral y emocional, fenómenos que seguramente es totalmente inconsciente:

   * Transforman sus deseos en necesidades. De esta manera consiguen su primera justificación para conseguir sus deseos, justificación moral para utilizar determinados medios a la hora de conseguir lo que "necesitan", justificación ante los demás y ante sí mismos. 

 * Muchas se quedan en la fase de las "necesidades", pero otros convierten esas "necesidades" en derechos. De esta manera el grado de justificación moral es mayor, tanto ante sí mismos como ante los demás. 

* Muchos se quedan en la fase de sus "derechos". pero otros convierten esos "derechos" en algo sagrado e irrenunciable. Lo sagrado es lo que da la justificación mayor de todas a la hora de usar cualquier medio para conseguir lo que se desea, pues para estas personas no hay nada más verdadero, más bueno que lo sagrado, y por lo tanto, no hay nada que merezca más ser defendido, ni nada por lo que más merezca luchar. 

  Nuestra sociedad es una sociedad muy variada y contradictoria, y sobre todo, es una sociedad muy fragmentada en multitud de grupos humanos, de asociaciones y organizaciones de todo tipo, y también de creencias. 

  * Cada fragmento tiene como objetivo conseguir sus deseos, y en cualquiera de esos fragmentos los deseos pueden alcanzar el grado de derechos sagrados e irrenunciables. 

  * Los diferentes deseos son casi siempre opuestos y la mayoría de los fragmentos no pueden conseguir lo que desean. Esto es causa de conflictos de muchos tipos. 

  * No existe un ideal de mundo mejor mayoritariamente aceptado, no existen valores morales generales (el concepto de moralidad actual consiste en argumentar que la inmoralidad comienza un milímetro más allá de lo que yo hago). De esta manera no existe un "pegamento" que pueda unir a los diferentes fragmentos en algo superior a sus particulares deseos, con lo cual, cada fragmento se dedica a conseguir sus objetivos y lo hace usando las tácticas y estrategias que le parecen posibles u oportunas, sin importarles los daños que puedan causar, y no les importa porque tienen la justificación de las "necesidades", de los "derechos" y de los "derechos sagrados e irrenunciables"

   A esto hay que añadir la ambición de los poderosos y de los que aspiran a serlo, una ambición donde se mezclan la astucia, la demagogia y las capacidades de manipulación de los diferentes fragmentos. 

   Y las ciudades se tiñen de sangre. 

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